viernes, 11 de abril de 2014

Saludar de mano



Pude que hasta el momento no nos hayamos percatado de que hay detrás de cada saludo de manos, sin embargo es importante destacar que tener este conocimiento puede darte múltiples satisfacciones tanto personales como profesionales ya que un buen saludo representa muchas cosas, aquí unos ejemplos:

  1. Darse la mano por principio de cuentas es una muestra de reconocimiento entre las personas; si bien es cierto que lo hacemos muy a menudo, también lo es que en algunos casos podemos vivir que nos dejen con la mano estirada o ver a personas que les muestran el mismo gesto, esto es desprecio, falta de reconocimiento y valor hacia quien sí estira su mano para estrechar la de su futuro interlocutor;
  2. Una persona segura de sí misma y extrovertido generalmente saluda de manera firme como se muestra en la imagen inicial de esta publicación, no así las personas inseguras e introvertidas pues ellos inconscientemente suponen a los demás superiores por lo que se reprimen e intentan no mostrar su verdadera personalidad así que saludan sin fuerza o únicamente con los dedos;
  3. La distancia entre la que se encuentran los interlocutores varía dependiendo de su altura y afinidad (a primera vista), pero generalmente oscila entre 60 y 90 centímetros, lo que se considera una distancia social, si excede de esta distancia y no es por razón de la altura, automáticamente las personas captan esto como un rechazo inicial o temor; y por el contrario si es menor esta distancia, pueden considerarlo invasivo a su espacio personal por lo que se puede generar un rechazo.
  4. En todas las ocasiones el saludo lleva aparejadas gesticulaciones siendo la más común la sonrisa, pero existen muchas otras como la reverencia, el desvío de la mirada, levantamiento de cejas, o la toma del brazo del interlocutor con la otra mano; lo que se recomienda en un saludo inicial es una sonrisa sincera, no fijar mucho tiempo la mirada en los ojos de la persona que se está conociendo (esto puede tomarse como un reto o agresión) y un pequeño asentimiento con la cabeza; esto es con el fin de hacerle ver que se está de acuerdo con su llegada o intervención y que no existe ningún ánimo de agresión.
  5. Cuando se da la mano de manera social se acompaña de un pequeño estirón hacia arriba y hacia abajo, sin embargo, en un ambiente menos formal, es aceptado varios estirones (siempre y cuando no excedan de tres, porque se consideraría al igual que un acercamiento, algo invasivo).
Estos son cinco consejos que ponemos a tu disposición para que analices las situaciones en las que te encuentras y puedas desarrollarte con ventajas ante cualquier persona.

No hay comentarios:

Publicar un comentario